Redacción El Cerrito
El Periódico
A los 73 años de edad y sin que padeciera enfermedad alguna, dejó de existir el reconocido comerciante de abarrotes del municipio del Cerrito, Álvaro Jesús Otalvaro Colorado, de acuerdo a la información suministrada por su hija Mónica Andrea Buitrago, su padre se encontraba en la parte exterior del granero ubicado en la calle 9 número 16-37 del barrio Chapinero, ósea en la calle dialogando con su esposa Mónica Vargas valencia a eso de las 6:30 de la tarde del pasado 6 de enero, cuando de repente le dijo a su compañera, "mija cójame que me caigo" y se desplomó, debiendo ser remitido al Hospital San Rafael de esta localidad por su hija, y minutos después fue necesario internarlo en el Hospital Universitario del valle por la señora Mónica Vargas, pero lo inesperado llegó para esta familia, como fue el deceso del jefe del hogar el día siguiente 7 de enero a las 5:30 de la mañana, presentando un derrame cerebral. Era un hombre muy alentado, de sanas costumbres, alegre, dicharachero, siempre mantenía una respuesta alentadora para quienes acudían a él en busca de un sabio consejo, a más de Mónica Andrea dejó a María Camila Otalvaro, su compañera sentimental le asistió desde el primer momento del insuceso y hasta que se despidió de este mundo.
Las honras fúnebres estuvieron a cargo de Pre- Excequiales Bueno del municipio del Cerrito, la familia Vargas Valencia agradece a las personas que le acompañaron durante los momentos de angustia, soledad y dolor.
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A los 73 años de edad y sin que padeciera enfermedad alguna, dejó de existir el reconocido comerciante de abarrotes del municipio del Cerrito, Álvaro Jesús Otalvaro Colorado, de acuerdo a la información suministrada por su hija Mónica Andrea Buitrago, su padre se encontraba en la parte exterior del granero ubicado en la calle 9 número 16-37 del barrio Chapinero, ósea en la calle dialogando con su esposa Mónica Vargas valencia a eso de las 6:30 de la tarde del pasado 6 de enero, cuando de repente le dijo a su compañera, "mija cójame que me caigo" y se desplomó, debiendo ser remitido al Hospital San Rafael de esta localidad por su hija, y minutos después fue necesario internarlo en el Hospital Universitario del valle por la señora Mónica Vargas, pero lo inesperado llegó para esta familia, como fue el deceso del jefe del hogar el día siguiente 7 de enero a las 5:30 de la mañana, presentando un derrame cerebral. Era un hombre muy alentado, de sanas costumbres, alegre, dicharachero, siempre mantenía una respuesta alentadora para quienes acudían a él en busca de un sabio consejo, a más de Mónica Andrea dejó a María Camila Otalvaro, su compañera sentimental le asistió desde el primer momento del insuceso y hasta que se despidió de este mundo.
Las honras fúnebres estuvieron a cargo de Pre- Excequiales Bueno del municipio del Cerrito, la familia Vargas Valencia agradece a las personas que le acompañaron durante los momentos de angustia, soledad y dolor.
