Un tulueño entre los cuerpos de personas que desaparecieron buscando una guaca

Redacción Tuluá
El Periódico

El CTI de Villavicencio dijo que se hallaron 7 cuerpos, de los cuales fueron identificados cuatro.
Después de casi tres meses de espera e incertidumbre, las familias de tres militares y cuatro civiles que extrañamente se fueron a buscar una guaca a Vista Hermosa (Meta) tuvieron noticias.
Según la Fiscalía, en las veredas Las Palmeras y Laureles se encontraron cuatro cadáveres de N.N., que según las primeras indagaciones corresponden al teniente retirado José Luis Vera Avella, y los civiles Jorge Eliécer Álvarez Vargas, Adalver Vargas Jiménez y el veterinario Jorge Aníbal Malaver Artunduaga.
Se dio a conocer esta historia el pasado primero de septiembre. Un par de días después el Gaula y el CTI del Meta visitaron la finca Mata Bambú, en la inspección de Piñalito (Vista Hermosa), para verificar la desaparición de las siete personas.
La Fiscalía precisó que uno tres cuerpos corresponde al sargento Primero del Ejército Elkin Eduardo Sánchez Espinoza, quien había sido secuestrado el 9 agosto de este año y fue encontrado en zona rural de esa localidad, tenia dos hijos, y contaba con 42 años de edad y oriundo de la Villa de Céspedes.
LA DESAPARICIÓN
La esposa de José Luis habló por última vez con él unas horas antes de que desapareciera, le dijo que “no habían encontrado nada, que todo estaba muy sospechoso y que por lo tanto se devolvía para Bogotá”.
El día anterior, cuando se despidió de ella, le dijo que había un negocio interesante. “Me dicen que hay una plata enterrada en la finca La Palomera, entre San Juan de Arama y Vista Hermosa. Para salir no hay problema porque un helicóptero del Ejército nos va a recoger”, señaló José Luis antes de concretar el viaje.
Ese lunes 9, su trabajador incondicional Adalber Vargas, quien recibió la información de la supuesta guaca e hizo todos los contactos, lo recogió y le confirmó que viajaban con los sargentos Ángel Mario Bonilla y Elkin Eduardo Sánchez; además del veterinario José Aníbal Malaver y los comerciantes de Granada Luciano Benavides y Jorge Álvarez.
“En la casa nadie sabía que José Luis se iba a esa locura, hasta que la esposa nos avisó que la llamó y le dijo que ya habían cavado los huecos, pero que definitivamente no había nada y por eso se devolvían inmediatamente para Bogotá”, sin embargo, nunca volvió.
Ante el desespero, su esposa viajó a la zona y hasta consiguió que alguien fuera a La Palomera. “Efectivamente, están los huecos, pero se nota que no sacaron nada”, señaló el hombre que viajó al área. De lo que habría sucedido hay datos contradictorios. Dos habitantes de la zona contaron que los siete hombres fueron retenidos por el frente 27 de las Farc y que los guerrilleros los dividieron en dos grupos (los militares y los civiles) y que estaban selva adentro.