Redacción SevillaEl Periódico
El pasado viernes 21 de enero de 2011 Leonardo Peña de 26 años, conductor de un Willis afiliado a una empresa transportadora con el número 68 y de placas WFE 432 de Caicedonia, salió desde Sevilla para realizar el recorrido a varias veredas que lo llevarían hasta Calamar, donde por una falla mecánica en la dirección, al partírsele la biela, perdió el control del Campero y se salió de la carretera, precipitándose a varios metros, dando botes hasta caer a la playa del Río Bugalagrande. En el carro viajaban cinco personas junto al conductor, entre ellas una niña de 7 años que se dirigía hacia su escuela que estaba ubicada a tan solo cuadra y media de donde se presentó el accidente; la cual fue identificada como Angie Vanessa Agudelo Franco, quien falleció, puesto que el carro le cayó en la cabeza. Con profunda tristeza, los padres de la niña Oscar Agudelo, quien era compañero de trabajo de Leonardo, y Luz Aida Franco, relataron a nuestro corresponsal que el accidente se habría podido evitar, si el Consejo Municipal hubiera autorizado el transporte de los menores en otro vehículo más apropiado.
El conductor Leonardo Peña, conocido por sus allegados como “Boleo”, que también falleció en el siniestro, se encontraba soltero, residía con sus padres Leonardo Peña y Martha Arias, las honras fúnebres de las dos víctimas se realizó el domingo 23 de enero, después de una misa en la Iglesia San Luís Gonzaga. Paz en su tumba.
