Redacción TuluáEl Periódico
Hacia las 11:00 de la noche del pasado viernes 22 de Abril, fue ultimado de varios impactos de bala el Subintendente Luilly Giovanni Otálvaro Chicaiza de 35 años, los hechos se presentaron en la calle 41 con carrera 25 de un sector populoso de la capital vallecaucana. Asimismo se conoció que presuntamente el homicida es un menor de 16 años de edad.
Giovanni Otálvaro actualmente vivía en el barrio Jazmín de Tuluá junto a su esposa y sus tres hijos de 4,7 y 10 años de edad, hijo de Alba Mery Chicaiza y Francisco Antonio Otálvaro.
El uniformado tulueño víctima de este ataque sicarial en Cali estuvo vinculado desde hace 15 años a la institución policial de donde se graduó como patrullero en la Escuela de Policía Simón Bolívar de la Villa de Céspedes.
Hizo parte de varias estaciones policiales en Arauca, Nariño, Maicao y Valle, actualmente se desempeñaba como integrante de la Estación de Policía Los Laureles del barrio El Diamante en Cali. Luilly Otálvaro de 35 años, era natural de Buga, y egresado de la Institución Educativa Gimnasio del Pacífico en esta municipalidad.
Tristeza y consternación son los sentimientos que se entrelazan tras la pérdida de un hijo que entregó su vida al trabajo y a su familia. Un hogar conformado con valores y modales cristianos.
Sus amigos, familiares y demás compañeros recuerdan con gran carisma a Luilly Giovanni Otálvaro.
Eran 5 entre sus hermanos y ahora solo quedan tres hombres y una mujer.
Otro uniformado de la policía que al igual que Luilly Giovanni Otálvaro Chicaiza fue victima de la inseguridad é intolerancia fue el patrullero Wilber García García, de 30 años, y quien llevaba tres años en la institución. Luego de culminar su turno de trabajo, el policía salió en una motocicleta, y en un semáforo un joven de 14 años lo amenazó con un revólver para robarlo, al tonar que García también estaba armado, el joven reaccionó y le propinó dos disparos en el abdomen.
Giovanni Otálvaro actualmente vivía en el barrio Jazmín de Tuluá junto a su esposa y sus tres hijos de 4,7 y 10 años de edad, hijo de Alba Mery Chicaiza y Francisco Antonio Otálvaro.
El uniformado tulueño víctima de este ataque sicarial en Cali estuvo vinculado desde hace 15 años a la institución policial de donde se graduó como patrullero en la Escuela de Policía Simón Bolívar de la Villa de Céspedes.
Hizo parte de varias estaciones policiales en Arauca, Nariño, Maicao y Valle, actualmente se desempeñaba como integrante de la Estación de Policía Los Laureles del barrio El Diamante en Cali. Luilly Otálvaro de 35 años, era natural de Buga, y egresado de la Institución Educativa Gimnasio del Pacífico en esta municipalidad.
Tristeza y consternación son los sentimientos que se entrelazan tras la pérdida de un hijo que entregó su vida al trabajo y a su familia. Un hogar conformado con valores y modales cristianos.
Sus amigos, familiares y demás compañeros recuerdan con gran carisma a Luilly Giovanni Otálvaro.
Eran 5 entre sus hermanos y ahora solo quedan tres hombres y una mujer.
Otro uniformado de la policía que al igual que Luilly Giovanni Otálvaro Chicaiza fue victima de la inseguridad é intolerancia fue el patrullero Wilber García García, de 30 años, y quien llevaba tres años en la institución. Luego de culminar su turno de trabajo, el policía salió en una motocicleta, y en un semáforo un joven de 14 años lo amenazó con un revólver para robarlo, al tonar que García también estaba armado, el joven reaccionó y le propinó dos disparos en el abdomen.
