Redacción Zarzal
El Periódico
Después de jugar su última mano de parqués con varios amigos en el parque principal, como regularmente lo hacía, Arcadio Montaño Torres, de 42 años, mejor conocido en el corregimiento de La Paila por sus amigos como “Juaco”, decidió irse para su casa, montó su bicicleta y alegremente con unos cuantos biches en su cabeza se marchó. Tan solo había pedaleado un par de cuadras, sin saber que esa también sería su última noche de vida, pues en la carrera 5 con calle 1ª, frente a la galería ya lo esperaba la muerte a manos de un desconocido que le salió al paso y sin mediar palabra alguna con él, le disparó en repetidas veces, dejándolo agonizante en el lugar. Los vecinos, al acercarse y notar que aún presentaba algunos signos de vida, decidieron trasladarlo hasta un centro asistencial, falleciendo segundos después.
Según los familiares de Montaño, éste no tenía enemigos ni amenazas contra su vida.
“Juaco” fue definido como un hombre alegre que gustaba de la música autóctona afro, como el currulao, pues lo traía en su sangre siendo nacido en San Bernardo Cauca; era el cuarto de catorce hermanos, hijo de Arcadio Montaño Torres y Venerada Torres Montaño, y deja como descendencia seis hijos en dos relaciones amorosas.