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Redacción Guacarí
El Periódico
Contando con 109 años de edad y 11 días después de haberlos cumplido, falleció la benefactora del municipio de Guacari Valle, la señora Elvira Villafañe de Saavedra, quien a temprana edad contrajera matrimonio con el señor José Saavedra (q.e.p.d.)
Hablar de Doña Elvira es remontarse a la historia, es un tema del ayer como suelen manifestarlo los jóvenes, pues fue una mujer de mucho emprendimiento, entusiasta y servicial, fue la persona que donó el terreno para que continuara la obra social y espiritual de la iglesia unión Misionera en esta localidad, regentada por la comunidad de Misioneros Norteamericanos, Iglesia que está vigente en el barrio Santa Bárbara.
Fue propietaria, con su esposo, de grandes extensiones de tierra en Guacarí, las que fueron pasando a manos de las comunidades menos favorecidas y de quienes le solicitaban un lugarcito para construir un cambuche. Se caracterizó por el sentido humano y de servicio, de hecho su esposo pertenecía a la Comunidad Unión Misionera y allí cumplía una labor evangelizadora como Pastor de su comunidad; fueron ellos los precursores de los diversos programas educativos con la población infantil y juvenil, muchos de ellos, hoy adultos mayores, recuerdan sus años de estudio y de congregación en las polvorosas calles de la localidad, donde realizaban las actividades recreativas y de integración.
Doña Elvira y su esposo el señor José, se despojaban de todo con el firme propósito de brindar el pan diario a los niños y jóvenes que acudían a clase a la Iglesia Unión Misionera, el que se convirtiera en un centro educativo gratuito y donde a más del estudio, recibían desayuno, almuerzo y hasta la comida porque en esa época, la mayoría de personas pobladoras de Guacarí eran desplazados de otras regiones del Valle y de Colombia, quienes encontraron en esta pareja de esposos, una mano de aliento y de favorecimiento.
No dejaron hijos, pero si un gran legado social, cultural y de dinamismo que hoy por hoy se refleja en el desarrollo y expansión del municipio.
La señora María Cupertina Amaya viuda de Castro, es una de aquellas personas que logró compartir por muchos años con Doña Elvira, pues relató a la Redacción del Semanario El Periódico, que su familia padre, madre y hermanos, llegaron a este municipio, provenientes del Chocó, siendo desplazados por la violencia, encontrando en esta localidad ese calor humano, de cariño y afectuoso que habían dejado en su tierra natal, siendo esta pareja de esposo quienes les brindaron mucho de lo que hoy son. La señora Elvira Villafañe y su esposo Don José Saavedra, fueron los primeros pobladores del barrio Santa Bárbara, y aún en su lecho de enferma hasta hace pocos meses, pidió a sus familiares cercanos, le llevaran a Guacarí para saludar su gente y de hecho se le cumplió la petición logrando compartir con la comunidad de la Unión Misionera y dejándoles un recado: “que continuaran con la obra social y no la dejaran caer”, lo que fue inmediatamente atendido por esta comunidad. En su corto recorrido en vehículo, recordó aquellos años de juventud cuando se instaló en esta tierra grata, prospera y de mucha pujanza. Nació el 11 de Febrero de 1.904 y siempre mantuvo la esperanza de un mejor mañana para todos, hoy descansa en la paz del Señor.
Los servicios fúnebres estuvieron a cargo de la funeraria Bueno de Guacarí; sus familiares agradecen las manifestaciones de condolencia y las voces de aliento, por la pérdida irreparable de la gran benefactora del Guacarí viejo.
