Redacción El Cerrito
El Periódico
En la calle 15 con carrera 15, detrás de la estación de la Policía Nacional en el municipio de Tame en el departamento de Arauca, el pasado lunes 22 de abril, fue asesinado el patrullero Richard David Ahumada Rodríguez.
El uniformado, oriundo de Cerrito Valle, tenía 26 años y llevaba 5 años y 3 meses en la institución.
Se conoció que hombres desconocidos que se transportaban en una motocicleta de alto cilindraje marca Yamaha FZ, color azul, portando casco cerrado, dispararon contra el Policía que prestaba seguridad frente a la residencia del Alcalde de esta localidad, Octavio Pérez Hernández, ocasionándole la muerte de manera inmediata en el lugar de los hechos.
Los hombres robaron el armamento del uniformado y tomaron rumbo desconocido, dándose la búsqueda de los sicarios inmediatamente por parte de las autoridades.
A la hora en que se presentó el hecho, se dirigían los estudiantes a las escuelas y en un banco cercano había varias personas haciendo cola para ingresar, lo cual generó zozobra en la zona del centro del municipio de Tame.
La Policía nacional atribuyó a la guerrilla de las Farc la muerte del patrullero David Ahumada Rodríguez, en zona rural del municipio de Tame, en el departamento de Arauca.
Según la Policía, el patrullero murió en medio del llamado "plan pistola" de la guerrilla de las Farc, para atacar a integrantes de la institución.
Los sicarios utilizan varios mecanismos para su accionar contra los uniformados, se movilizan en motocicletas cuando cometen los ataques y les roban las armas de dotación a los Policías o les disparan a través de francotiradores.
Según recordó con nostalgia su padre Jesús Ahumada, que su hijo siempre decía “hay que dejar trabajar a la gente”; pues cuando algún conductor al cual requería no tenía algún documento al día, le daba la oportunidad de seguir, con el compromiso que al día siguiente lo tuviera.
Richard era un sobresaliente Técnico Electrónico del Sena y había ganado una beca para estudiar en España, la cual rechazó y prefirió quedarse en la policía y de paso estar más cerca a su familia.
