Dos muertos y dos heridos dejan brotes de violencia en Buga

Carlos Octavio Piraquive

Francisco Javier Florez Soto

Jhonny Alexander Tobar Melo

Redacción Buga

El Periódico

El pasado miércoles casi simultáneamente se cometieron cuatro atentados con arma de fuego en la Ciudad Señora, que dejaron como saldo dos personas heridas y dos muertas.

El primer suceso se reportó hacia las 12:50 de la tarde en la salida norte del municipio, en el sitio conocido como “Lechugas”, allí el conductor de un camión en confusos hechos le propinó un disparo a la altura de la rodilla a un hombre de 60 años, que fue identificado como Ramón Cifuentes; este fue trasladado hasta el hospital San José de Buga e ingresado al área de urgencias donde se recupera satisfactoriamente.

Minutos después, hacia la 1:15 de la tarde del mismo día, las autoridades fueron informadas del atentado con arma de fuego contra otro sujeto que se registró en la calle 24 entre carreras 11 y 12 del barrio María Luisa de la Espada, donde un desconocido le propinó dos disparos a un reconocido vendedor de frituras, identificado como Carlos Octavio Piraquive, de 45 años, conocido  popularmente como “platanitos”,  que de inmediato fue trasladado al hospital San José donde fue sometido una cirugía.

Mientras esto ocurría en ese sitio, otros dos hombres eran baleados en la  carrea 15A entre calles 22 y 22A del barrio Jorge Eliecer Gaitán, perdiendo la vida inmediatamente después  de recibir múltiples disparos en la cabeza y el cuerpo,  Francisco Javier Florez Soto, de 37 años, quien se desplazaba por el sector mientras desarrollaba su trabajo de asesor comercial de una empresa de  materias primas  para la fabricación de colchones, alcobas, y lencería. Otro hombre que salía de la casa de su abuela donde habitualmente almorzaba, fue alcanzado por tres disparos de los cuales uno lo recibió en la cabeza mientras intentaba abordar su motocicleta para regresar al taller donde laboraba como mecánico de motos; se trata de Jhonny Alexander Tobar Melo, de 21 años, que herido gravemente fue trasladado hasta el hospital san José donde fue intervenido quirúrgicamente, pero por el daño causado por los disparos en sus órganos, falleció minutos después.

Según los familiares de Tobar, a quien le sobreviven su única hija de tan solo  un año, y su esposa Sandra Lorena Restrepo Agudelo , con la cual convivía desde hacía cuatro años, éste fue víctima de las balas perdidas en el ataque sicarial que iba dirigido contra  Flores. 

Por su parte, los allegados de Francisco Javier explicaron que residía en el barrio Las Palmitas, que era el menor de dos hermanos y le sobrevive un hijo.