Redacción Tuluá
El Periódico
Las autoridades policiales de Tuluá fueron alertadas el pasado domingo 4 de septiembre hacia las 8:00 de la noche, por la muerte violenta de un hombre, el cual que se encontraba tendido en medio de una de las vías principales de la ciudad “Corazón del Valle”.
El occiso respondía al nombre de Mauricio Grajales Morales, contaba con 34 años de edad, era el menor de varios hermanos, natural del Chocó, llevaba varios años sumido en la drogadicción y la indigencia; en algunas oportunidades había llegado hasta su vivienda en el sector del Corregimiento de Agua Clara con heridas de cuchillo en su cuerpo a causa de riñas callejeras.
Todo parece indicar que el individuo huía de sus atacantes desde el sector céntrico de la Villa de Céspedes y a su paso por la calle 25 con carrera 18 no pudo más, lugar donde se desplomó sin vida.
De Grajales Morales, también se pudo establecer que frecuentaba constantemente el sector de la galería donde era conocido como “El Zarco”; su cuerpo presentó tres heridas producidas con un arma cortopunzante, una en su pecho, otra en la espalda y una última en la mano derecha al parecer recibida en un intento de defensa.
Las labores de levantamiento del cadáver fueron realizadas por unidades de la Fiscalía General de la Nación, quienes adelantaran las investigaciones pertinentes.
“El Zarco” hacía parte de una familia oriunda del municipio de San José del Palmar, departamento del Chocó, radicados en Tuluá desde hacía 28 años.
