Redacción Riofrío
El Periódico
Los habitantes del corregimiento de Fenicia, jurisdicción de Riofrío, lamentan el asesinato en la capital risaraldense de Marino Carmona Buitrago, quien a sus 63 años, vio de frente a la muerte cuando un sicario le disparó dos veces en su cara, mientras se encontraba en la parte trasera de la vivienda, era oriundo de Fenicia, en el Centro del Valle del Cauca y desde hacía 30 años se trasladó a Pereira. Residía en Altos de la Capilla, donde compartía en unión libre con Marleny, dejando dos hijos de ella, y su hija de 8 años. La victima de este asesinato era el menor de seis hermanos y dado que por su avanzada edad no conseguía trabajo, se dedicó a la chatarrería, teniendo como deseos montar una zapatería en la parte posterior de la que por muchos años fuera su vivienda, es por ello que estaba construyendo una especie de kiosco para trabajar con uno de sus hermanos. Fue en ese momento mientras trabajaba en la realización de la obra civil de uno de sus grandes sueños, que llegó la muerte disfrazada de sicario y lo impacto. Su hermana mayor de quien omitimos la identidad por razones de seguridad, manifestó que su hermano Marino había manifestado tener amenazas de muerte, pero que jamás pudo enterarse de la razón de ello.
“Chito”, como le distinguían cariñosamente sus amigos, gustaba ver jugar fútbol, era alegre y muy trabajador, en igual manera se pudo establecer que el sicario de quien se desconoce su identidad, utilizó un arma de fuego calibre nueve milímetros que tras cometer este delito huyó del lugar sin dejar rastro.
