Redacción Trujillo
El Periódico
En la cancha de fútbol del corregimiento de Huasanó, jurisdicción del municipio de Trujillo, en el centro del Valle, los sicarios acabaron con la vida de un hombre y les causaron heridas de gravedad a dos menores, cuando se encontraban departiendo durante un partido de fútbol.
Precisamente cuando el reloj marcaba las 3:00 de la tarde del pasado domingo 1 de abril de 2012.
La primera víctima de esta incursión sicarial fue identificada como Eduardo Perea Chávez de 48 años de edad, quien recibió varios impactos de bala en diferentes partes del cuerpo, causándole la muerte de manera inmediata.
Los antisociales dispararon contra las personas que se encontraban al lado del occiso, hiriendo de gravedad a dos menores uno de ellos su hijo de 14 años de edad y el otro un joven estudiante que falleció horas después en uno de los centros asistenciales de la Villa de Céspedes, ante la gravedad de las lesiones que afectaron órganos vitales y que no le permitieron a los facultativos salvarle la vida, identificado como Santiago Hurtado Gómez de 16 años de edad, quien de acuerdo con las autoridades que practicaron las diligencias de levantamiento, recibió un impacto de bala en la cabeza que le causó un trauma craneoencefálico severo.
El hecho se presentó cerca a la Estación de Policía de la zona rural plana de Trujillo, sin que los antisociales dieran tiempo a los uniformados de reaccionar oportunamente para tratar de interceptar a los delincuentes que huyeron del lugar de los hechos sin dejar rastro.