Redacción Tuluá
El Periódico
En un percance se registró el domingo 8 de agosto hacia las 7:00 de la mañana entre el centro recreacional de Comfandi y el corregimiento de los Chancos, dejó como saldo un muerto y otra persona con leves heridas.
En ese sitio, perdió la vida, Alejandro Zuluaga Mesa, de 24 años, a quien sus amigos y allegados conocían como “Tobi”, quien conducía un automóvil Mazda Allegro modelo 2001 de placas CEZ-358 de Cali, vehículo que prácticamente se partió en dos debido al fuerte impacto.
En el mismo hecho resultó herido su acompañante, identificado como Gustavo Adolfo Pineda, de 25 años, quien no registró heridas.
De acuerdo con la información suministrada por los familiares de la víctima estos jóvenes a primera hora del día decidieron desplazarse a la ciudad de Buga a donde se dirigían.
De acuerdo con el croquis que hizo la policía de carreteras, el automóvil Mazda de color azul, en donde se movilizaban las víctimas, chocó violentamente contra la baranda metálica que divide las dos calzadas lo que hizo que el automotor diera varias vueltas de campana destruyéndose totalmente.
Por el fuerte impacto, los cuerpos de Alejandro Zuluaga y su amigo Gustavo Pineda, fueron lanzados por las ventanas con asiento y todo quedando tendidos sobre la cuneta de cemento que divide las dos carreteras mientras que el vehículo, convertido en una bola de hierros retorcidos, quedó ubicado a por lo menos 20 metros de distancia.
La policía de carreteras, que hizo el levantamiento del cadáver dijo, que por las huellas dejadas sobre el piso, ese vehículo se desplazaba mínimo a 140 kilómetros por hora. Alejandro Zuluaga Mesa no pudo controlar el vehículo que era propiedad de un primo suyo que lo había prestado para que ese día se divirtiera con su novia y un grupo de amigos del barrio Bello Horizonte, en donde fue la última parada que hicieron para departir en medio de unos tragos.
El Periódico
En un percance se registró el domingo 8 de agosto hacia las 7:00 de la mañana entre el centro recreacional de Comfandi y el corregimiento de los Chancos, dejó como saldo un muerto y otra persona con leves heridas.
En ese sitio, perdió la vida, Alejandro Zuluaga Mesa, de 24 años, a quien sus amigos y allegados conocían como “Tobi”, quien conducía un automóvil Mazda Allegro modelo 2001 de placas CEZ-358 de Cali, vehículo que prácticamente se partió en dos debido al fuerte impacto.
En el mismo hecho resultó herido su acompañante, identificado como Gustavo Adolfo Pineda, de 25 años, quien no registró heridas.
De acuerdo con la información suministrada por los familiares de la víctima estos jóvenes a primera hora del día decidieron desplazarse a la ciudad de Buga a donde se dirigían.
De acuerdo con el croquis que hizo la policía de carreteras, el automóvil Mazda de color azul, en donde se movilizaban las víctimas, chocó violentamente contra la baranda metálica que divide las dos calzadas lo que hizo que el automotor diera varias vueltas de campana destruyéndose totalmente.
Por el fuerte impacto, los cuerpos de Alejandro Zuluaga y su amigo Gustavo Pineda, fueron lanzados por las ventanas con asiento y todo quedando tendidos sobre la cuneta de cemento que divide las dos carreteras mientras que el vehículo, convertido en una bola de hierros retorcidos, quedó ubicado a por lo menos 20 metros de distancia.
La policía de carreteras, que hizo el levantamiento del cadáver dijo, que por las huellas dejadas sobre el piso, ese vehículo se desplazaba mínimo a 140 kilómetros por hora. Alejandro Zuluaga Mesa no pudo controlar el vehículo que era propiedad de un primo suyo que lo había prestado para que ese día se divirtiera con su novia y un grupo de amigos del barrio Bello Horizonte, en donde fue la última parada que hicieron para departir en medio de unos tragos.