La víctima respondía al nombre de Germán Giraldo, quien fue a dicho sitio a visitar a sus padres, estuvo departiendo un rato con ellos y cuando salió de allí para dirigirse a su residencia, fue interceptado por varios hombres que se lo llevaron a un lugar apartado donde le dispararon en repetidas oportunidades hasta acabar con su vida; acto seguido los agresores huyeron del sitio dejando el cuerpo del infortunado hombre abandonado a un lado de la carretera. Sólo hasta el día domingo en la tarde, sus familiares pudieron subir al sitio y recoger el cuerpo, porque ni la funeraria llegó al lugar.
Se conoció que Giraldo laboraba en una empresa de cítricos, deja una hija. Las autoridades investigan el hecho.