
La joven víctima de los sicarios recibió varios impactos con arma de fuego y herido de gravedad fue llevado al hospital local, siendo remitido hacia la Clínica Mariangel de Tuluá, donde horas después falleció.
En el mismo hecho resultó herido otro joven que pese a la gravedad de las lesiones sufridas sigue recluido en un centro asistencial luchando por sobrevivir.
El reporte entregado por las autoridades señala el microtrafico como la posible causa del atentado que cobró la vida del adolescente.
Infortunadamente los alrededores de la Ermita Nuestra Señora de las Lajas, considerada un bien patrimonial de la nación, se ha convertido en el punto de encuentro de las personas consumidoras de alucinógenos y en la noche aprovechan la nula iluminación para aposentarse en el lugar lo que genera inseguridad en esa zona de la localidad.
La muerte de Flórez generó el rechazo de la comunidad en general que además de lamentar el atentado le solicitó al alcalde Julián Hernández y a las autoridades de policía y ejército, poner en marcha las medidas necesarias para hacerle frente a la inseguridad que en el 2016 ha cobrado la vida de por lo menos 20 personas, la mayoría de ellos jóvenes.