Tuluá - De un infarto al miocardio falleció la noche del lunes anterior el abogado Alberto Isaza Botero, quien se desempeñó durante más de 25 años como notario primero de Tuluá,
Las exequias del doctor Isaza Botero se cumplieron este miércoles 2 de septiembre de 2009 a las once de la mañana en la iglesia de la Sagrada Familia en el Barrio Alvernia de Tuluá, su velación se cumplió en la sala del mismo barrio.
Alberto Isaza se disponía a ser intervenido quirúrgicamente del corazón.
El 15 de agosto del año 2.006 le dijo a dios a los trabajos de la notaria, pues logro pensionarse y dedicarse a la familia, su recuerdo quedara entre las muchas personas que él les brindó ayuda y apoyo oportunamente, siempre estuvo presto a servir la comunidad sin reparo alguno, este es una de las mejores herencias que el deja a su familia, la que siempre le apoyo y compartió con el su sentido social y de pertenencia por su ciudad.
Era un hombre muy sensible y de sanas costumbres, lo recordaré eternamente porque gracias a él, mi hijo pudo salvar su pierna, el doctor Isaza sufragó los gastos médicos que se elevaron a once millones de pesos, dijo consternado Juan Carlos Solorza, operario de Robles 1490 quien estuvo laborando con el ex -notario de este municipio.
Esta casa periodística hace llegar la voz de condolencia a sus familiares y deudos, por la pérdida irreparable de tan admirable hombre, paz en su tumba.
Las exequias del doctor Isaza Botero se cumplieron este miércoles 2 de septiembre de 2009 a las once de la mañana en la iglesia de la Sagrada Familia en el Barrio Alvernia de Tuluá, su velación se cumplió en la sala del mismo barrio.
Alberto Isaza se disponía a ser intervenido quirúrgicamente del corazón.
El 15 de agosto del año 2.006 le dijo a dios a los trabajos de la notaria, pues logro pensionarse y dedicarse a la familia, su recuerdo quedara entre las muchas personas que él les brindó ayuda y apoyo oportunamente, siempre estuvo presto a servir la comunidad sin reparo alguno, este es una de las mejores herencias que el deja a su familia, la que siempre le apoyo y compartió con el su sentido social y de pertenencia por su ciudad.
Era un hombre muy sensible y de sanas costumbres, lo recordaré eternamente porque gracias a él, mi hijo pudo salvar su pierna, el doctor Isaza sufragó los gastos médicos que se elevaron a once millones de pesos, dijo consternado Juan Carlos Solorza, operario de Robles 1490 quien estuvo laborando con el ex -notario de este municipio.
Esta casa periodística hace llegar la voz de condolencia a sus familiares y deudos, por la pérdida irreparable de tan admirable hombre, paz en su tumba.